Educación interprofesional (IPE)

El IPE me influyó al 100.000 %. He aprendido que me gusta tratar a pacientes complejos, tanto desde el punto de vista médico como social. Estar en el VCCC ha sido muy agradable y estoy considerando seriamente la ID como especialidad.

Antes de empezar el IPE no tenía planes de trabajar específicamente con personas que viven con el VIH. El IPE me ha abierto los ojos a las oportunidades disponibles para trabajar con esta población y me ha dado confianza para navegar por los recursos disponibles para ellos. Ahora veo que trabajar con esta población abarca todos los aspectos demográficos que quiero ver en mi futura práctica. Siempre que me preguntan, digo a la gente que sería un honor seguir trabajando con esta población.

Mis conocimientos básicos sobre el VIH/sida no iban mucho más allá de saber qué significaban las siglas. Después de empezar el programa, empecé a sentirme muy unido a esta población de pacientes y me fascinó no solo el VIH, sino las enfermedades infecciosas en general. Es una población especial y me abrió los ojos a la atención integral de las personas. Hay tanta desinformación y falta de conocimientos/experiencia, incluso entre profesionales formados, que me sentí muy identificado con el hecho de ser la persona a la que los demás asistan en busca de preguntas o información. Supe muy pronto que quería una carrera que de alguna manera implicara trabajar con personas que viven con el VIH. Por desgracia, hay pocas oportunidades profesionales para los farmacéuticos que sean tan atractivas como trabajar con personas que viven con el VIH. Sin embargo, después de graduarme empecé a trabajar como farmacéutico clínico en el hospital de Glasgow, KY, mi ciudad natal, donde me convertí en el “farmacéutico de enfermedades infecciosas” no oficial (somos demasiado pequeños para tener realmente especialidades). He podido educar a muchos de mis colegas sobre los matices de esta población y estado de enfermedad. Creo que siempre sentiré una conexión con esta clase de personas.

Fue una experiencia maravillosa. El IPE me ayudó a conocer mejor a una población con la que nunca había pensado trabajar. Tenía poco o ningún conocimiento sobre el VIH/sida, pero me encanta aprender. El personal del SE AETC me facilitó una gran cantidad de conocimientos y fue muy paciente para explicarme las cosas de una manera que no me abrumara. Mi parte favorita de la experiencia fue poder seguir a un cliente desde el principio de una cita en la sala de espera hasta la salida. Fue realmente increíble ver todo lo que los clientes pasan en una visita con su doctor, desde los exámenes de laboratorio hasta la gestión de casos. IPE me dio la confianza para aplicar a mi trabajo actual en Careteam+ en Conway, SC como un gerente de casos médicos. Sin esa experiencia previa, no me habría considerado calificado para el puesto. Ahora tengo 80 clientes VIH positivos con los que tengo el privilegio de trabajar como gerente de su caso. Estoy más que agradecido por la experiencia del IPE y las oportunidades que me ha dado.